La reconfiguración global de sistemas educativos, productivos y tecnológicos, la persistencia de viejos problemas, y la emergencia de nuevos agentes y agencias sociales, magnifican la necesidad de transformar los enfoques tradicionales de enseñanza-aprendizaje. Se suma a lo anterior la necesidad potenciar el acceso a recursos educativos globales, y a contribuir a una mayor flexibilidad en el aprendizaje. Así, el ámbito académico está experimentando una inminente necesidad de adaptar los viejos programas educativos, o quedar rezagados.

Por su parte, la irrupción de infraestructuras, plataformas, e Inteligencia Artificial está alterando fundamentalmente los métodos de enseñanza-aprendizaje. Los profesores deben apropiarse e inculcar familiaridad con tales herramientas, pues esfundamental preparar a los estudiantes para un mundo laboral que demanda habilidades digitales. Por ello, comprender la esencia de estos cambios y su impacto en la sociedad es crucial para que la universidad siga desempeñando un papel central en el moldeamiento del conocimiento y la innovación en la era contemporánea.

Por otro lado, se encuentran en exponencial desarrollo enfoques que nos obligan a reorientar nuestra labor educativa. Entre ellos, la revolución en las ciencias cognitivas, asociada a la llamada cognición 4E, reconocen la corporeidad, la inmersión, la extensión y el enactivismo, donde la cognición constituye una actividad ininterrumpida, modelada por procesos de auto organización derivados de la participación activa de los sujetos con su entorno en cada uno de los procesos intelectuales. Esto proporciona un marco teórico sólido mediante el cual es necesario reorientar nuevas didácticas que otorguen a nuestro cuerpo, su contexto y sus propensiones naturales, el papel que les corresponde en el proceso de aprendizaje. 

Este primer workshop busca responder a las necesidades anteriores que potencien nuevas estrategias educativas, abonando así al rol evolutivo que la Universidad debe cumplir en la sociedad contemporánea mediante la construcción proactiva de espacios dinámicos que impulsen la adopción de enfoques educativos novedosos epistémicamente justificados y tecnológicamente viables. No se trata de sustituir los actuales métodos de enseñanza con otros digitales, sino de completar y optimizar su interacción.